El Perú muchas veces es aplaudido
por el aporte económico que las empresas mineras traen al país, y esto nadie lo
niega aunque alguna vez nos hemos preguntado ¿será todo bueno lo que aporta la
minería al país ? El mundo tiene un motivo porque voltear a ver al Perú, muy
aparte de la Maravilla de Machu Picchu y es que somos uno de los países más
ranqueados (o sea dentro del 10) de poseer, y no con mucho orgullo, una ciudad
de las ciudades más contaminadas del mundo; eso si no causa alegría.
La minería ha traído, trae y
seguirá trayendo problemas con respecto a la salud. Una vez alguien me pregunto
por qué los mineros ganan tanta plata y yo les dije que no sabía, y esta
persona me respondió: “es porque los que
le pagan saben que tiene su vida contada, muchos trabajan sabiendo (y otros no)
que van a morir mucho antes de lo que muere una persona promedio…”, me
asombro su respuesta y me añadió: “además
toman leche para que eso no sea tan pronto”.
Ahora podemos ver que ni los
propios trabajadores son beneficiados completamente; en mi opinión los únicos
beneficiados de esa actividad, es el dueño de la empresa y el gobierno. Eso es
solo por parte de los trabajadores de la
misma empresa. Por otra parte la contaminación que causa a los pueblos vecinos
es total, no beneficia en nada más que en simple y pobremente dinero, algo que
nunca podrá devolver lo que nos quita. En los pueblos causa enfermedades
respiratorias, sanguíneas, nervioso, cerebrales, digestivos y mucho más, además
al medio ambiente contamina los ríos, los peces, el aire, el suelo, la fauna y
flora del lugar y también trae contaminación sonora. Como consecuencias trae
las lluvias acidas, las muertes prematuras, muerte de los peces y imposibilidad
de poder consumir el agua de los ríos, dependencia a esa actividad puesto que
ya no se puede realizar otra actividad por la contaminación del medio ambiente.
En conclusión la minería a largo
plazo trae solo destrucción teniendo como único beneficio el miserable dinero
que nunca podrá pagar la vida de cada peruano que muere antes de su tiempo; la
minería es como el pecado, porque te engatusa con falsos argumentos que al
final te terminan condenando a la abnegación de tu propia vida.
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